Un muy buen resultado como visitante sacó el Real Valledupar Fútbol de Salón, quinteto que igualó 2-2 ante Piratas de Tibú, actual campeón de la Superliga colombiana que se vio sorprendido por el equipo de Willian Dan Ariño.
Frente al rival que lucía como el más complicado del calendario en la carretera, los vallenatos sacaron su mejor versión en lo que va de certamen, manejando orden y control de la ofensiva contraria que no pudo celebrar su tercera conquista en casa, a pesar de contar con la parcial que llenó las tribunas del polideportivo municipio Tibú, Norte de Santander.
Héctor Ávila abrió la cuenta para el Real Valledupar con un tanto que llegó luego de una efectiva maniobra colectiva y con el que ambos clubes se fueron al descanso.
En la segunda parte, movido por la necesidad y la presión de la localía, el actual monarca mejoró su accionar, generando opciones de gol, que lograron capitalizar en par de oportunidades por intermedio de Edwin Marín, la gran figura del ataque filibustero.
Cuando todo parecía que el partido cerraría con triunfo pirata, llegó el empate vallenato, justo al filo del silbatazo apareció Edgar Rodríguez para decretar el empate 2-2 definitivo que permite respirar al Real Valledupar, sumando su primer punto en una difícil cancha, luego de una extensa gira de tres partidos en un irregular inicio de temporada 2022.
"El partido nos deja un balance positivo, considerando esta plaza que es bastante complicada, con un equipo que viene de ser campeón y ante el que realizamos un buen trabajo para llevarnos un punto importante que nos permite trabajar en nuestro primer partido en casa el próximo sábado", declaró el DT Dan Ariño.
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